Fátima

La Policía Nacional ha detenido a la expareja de la mujer asesinada este martes en la calle Carena del barrio de Los Pajaritos. Según han confirmado fuentes policiales a ABC, el sospechoso ha sido arrestrado en un centro hospitalario donde estaba siendo atendido de varias lesiones.

De manera casi simultánea, agentes de la Policía Científica y del Grupo de Homicidios efectuaban un registro en la vivienda del presunto autor. Se da la circunstancia de que la expareja de la fallecida, que se llamaba Fátima, tiene su residencia en el mismo bloque, en el número tres de la calle Carena.

El presunto autor, que responde a las iniciales de E. R. B., de 51 años y de nacionalidad española, había sido denunciado por la víctima, pero no pesaban contra él orden de alejamiento ni medidas cautelares. El ahora detenido tenía antecedentes y acumulaba otras cuatro denuncias anteriores de cuatro mujeres y una orden de alejamiento de una expareja residente en Córdoba.

La víctima de Los Pajaritos fue apuñalada pasadas las ocho de la mañana en el rellano de las escaleras del bloque de viviendas donde vivía con sus dos hijos menores de edad.

Agentes de la Policía Científica y del Grupo de Homicidios, que ha asumido la investigación a primera hora de este martes, registraban la vivienda del sospechoso en busca de pruebas que apunten a la supuesta autoría del crimen. Las mismas fuentes han confirmado que en el piso no había nadie. Eso ocurría pasada la una de la tarde después de que la autoridad judicial ordenara el levantamiento del cadáver. Sobre las 8.48 horas llegaba el aviso del 112. El hijo mayor de la víctima alertaba a los servicios de emergencias, señalando que su madre había sido apuñalada en el rellano de la escalera de la finca. Algunos vecinos han afirmado que el menor, que tiene doce años, había presenciado el ataque. Si bien, otras fuentes apuntaban que avisó a los servicios de emergencia tras oir los gritos de socorro de su progenitora y salir a la escalera.

La víctima, que tenía 36 años, acababa de regresar de llevar al colegio a su hija pequeña, de nueve años. Las pesquisas de los agentes se centraron en un primer momento en su ámbito personal más cercano, aunque no ha sido hasta la detención del principal sospechoso cuando desde la Policía han confirmado que podría ser un nuevo caso de violencia machista. Los dos hijos de la finada eran de una relación anterior que tuvo con un hombre, con el que se había casado y que se encuentra en estos momentos en prisión. También lo había denunciado por violencia machista y contaba con medidas de protección por parte de la Policía Local de Sevilla.